sábado, 30 de octubre de 2010

Cubanos en Quintana Roo

QRCubanos
Sábado 30 de Octubre de 2010 23:23
que formaban parte del grupo más cercano del ahora ex presidente municipal Benito Juárez y ex candidato al gobierno de Quintana Roo, Gregorio Sánchez Martínez.

Los cubanos, unos 70, según los últimos datos de la investigación que realiza la Procuraduría General de la República (PGR), eran parte fundamental del proyecto de Sánchez Martínez: Asesores de seguridad e inteligencia, personal de enlaces con políticos y empresarios, secretarios privados, hombres de confianzas en operaciones privadas, operadores de logística y personal dedicado a la organización de espectáculos.

En los dos años de gobierno de Sánchez Martínez no sólo creció el número de personas de nacionalidad cubana cercanas o dentro del gobierno municipal. La presencia de los cubanos aumentó también en todo el territorio quintanarroense, especialmente en los municipios de Benito Juárez (Cancún), Isla Mujeres y Solidaridad.

La comunidad cubana era casi inexistente al principio del presente siglo en Quintana Roo.

Su sorprendente crecimiento, según información del gobierno de Quintana Roo y del Instituto Nacional de Migración (INM), se registró en dos etapas: la primera en el 2005 con la explosión de la migración ilegal de cubanos por México y, la segunda, a la llegada (2008) de Gregorio Sánchez a la alcaldía de Benito Juárez.

De acuerdo con datos oficiales del Instituto Nacional de Migración, en el 2005 había 893 cubanos residentes en el territorio de Quintana Roo: 810 no inmigrantes; 58 inmigrantes y 25 inmigrados. Era la tercera comunidad extranjera asentada en el estado, sólo superado por Estados Unidos ( 2,213) y Argentina (1,011).

Y estaban por arriba de la comunidad de Italia (799), Canadá (709) y España (688). En los últimos años, la cifra de la comunidad cubana (legal o ilegal) asentada en Quintana Roo casi se ha quintuplicado (más de seis mil, de acuerdo con información del gobierno estatal) en los últimos cinco años.

En los últimos dos años la presencia cubana es palpable en el gobierno municipal, empresarial, turístico y giros negros.

La familia feliz

Andrés, Javier y Niurka Sáliva, y un familiar de ellos, Boris del Valle Alonso, cubanos nacionalizados mexicanos, han sido las cabezas visibles del grupo de isleños que forman la numerosa colonia cubana en Cancún.

Niurka es la esposa del Gregorio Sánchez Martínez, declarado formalmente preso el 1 de junio por el titular del Juzgado Segundo de Distrito con sede en Tepic, Nayarit, Carlos Alberto Elorza Amores.

La hija del coronel del Ministerio del Interior (Gobernación) de Cuba, José Ángel Sáliva Pino, integró un grupo asesor de por lo menos 30 cubanos dentro del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), pero trabajaba con un amplio grupo de isleños residentes en la ciudad.

Uno de los testigos protegidos de la Procuraduría General de la República (PGR), conocido como Zajed, la acusó el 19 de enero de 2010 de participaren el tráfico ilegal de cubanos a Estados Unidos.

Andrés y Javier Sáliva, uno de ellos está casado con la hija del empresario Guillermo del Rosario Hernández, ex secretario de Turismo y representante legal de la empresa Promociones Bahía Azul S. A de C. V.

Los dos hermanos Formaban parte del grupo más cercano al ex alcalde y su labor principal era las relaciones con el sector empresarial. Pero sin duda el más activo de los cubanos que integraban el equipo de confianza de Sánchez Martínez, era Boris del Valle Alonso, familiar de los hermanos Sáliva.

Boris del Valle Alonso fue asesor de seguridad pública del ayuntamiento. Del Valle fue acusado de haber ayudado a instalar tres centros de espionaje en Cancún en donde se intervenían llamadas telefónicas.

El hombre de la seguridad y la inteligencia del ex candidato al gobierno de Quintana Roo fue acusado de participar en el asesinato del general Mauro Enrique Tello Quiñones ocurrido el 3 de Febrero de 2009.

Junto al general Tello Quiñones fueron ultimados el teniente Getulio César Román y Juan Ramírez Sánchez, sobrino del ex alcalde de Cancún.

El cubano Boris del Valle Alonso fue detenido el 6 de marzo de 2009 en el aeropuerto de la Ciudad de México por su relación, según el comunicado 242/09 de la Procuraduría General de la República , “con el grupo criminal Los Zetas”, a quienes brindaba protección e información privilegiada.

Como parte de las investigaciones derivadas de la averiguación Previa PGR/SIEDO/UEIDCS/051/09, que se inició por la ejecución del general de Brigada Mauro Enrique Tello Quiñónez, el teniente de Infantería Getulio Cesar Román Zúñiga y Juan Ramírez Sánchez, se descubrieron elementos que relacionan a Boris del Valle con el grupo de “Los Zetas” en Cancún.

El “Boris”, como se le conoce en Cancún, se encuentra recluido en el penal de “El Rincón”, en Tepic, Nayarit, el mismo a donde fue encarcelado Gregorio Sánchez Martínez.

Cubanos ejecutados en Cancún

Si bien ya existían registros en los ochentas y noventas de la migración ilegal cubana por el territorio mexicano - principalmente en la frontera que comparten el estado mexicano de Chiapas con el departamento guatemalteco de San Marcos -, el gobierno de Vicente Fox y la política norteamericana de pies secos/pies mojados, alentaron las salidas de cubanos hacia territorio mexicanos.

Quintana Roo, Chiapas, Tabasco, Veracruz y los Aeropuertos Internacionales de la Ciudad de México y Cancún son los puntos neurálgicos de la migración cubana hacia nuestro país que tiene como objetivo lograr pisar suelo estadounidense para acogerse a la Ley de Ajuste Cubano..

La emigración cubana ilegal hacia México aumentó de forma alarmante desde el segundo año del gobierno del presidente Fox, justo cuando las relaciones diplomáticas entre México y Cuba empezaron a convulsionarse. Con la llegada masiva de cubanos radicados en La Florida y cubanos (legales e ilegales) de La Habana , principalmente, el índice de violencia en la Península de Yucatán fue en aumento desde el 2005.

La presencia cada vez más activa de grupos de cubanos radicados en Miami que se dedican al tráfico de indocumentados en Cancún, Playa del Carmen, Isla Mujeres e Isla Contoy, pero sobre todo la disputa por el control de rutas que inicialmente fueron del narcotráfico, desató desde el año 2007 una violencia nunca vista en el estado.

El cubano Luis Lázaro Lara Morejón fue ejecutado en julio de 2007 de 10 balazos en una brecha de la carretera Cancún-Mérida; a fines de septiembre un cubano residente en la Florida de nombre Maximiliano Reyna Molas, alias “Richard Agüero”, fue acribillado en el estacionamiento del mercado de artesanías Coral Negro, en la zona hotelera.

Tres meses después su hermano, Juan Carlos Reyna Molas, fue emboscado por un comando armado en el fraccionamiento residencial Santa Fe. Luis Lázaro Lara Morejón y Maximiliano y Juan Carlos Reyna Molas son tres de los 30 ejecutados —entre jefes policíacos, pescadores, vendores de droga, policías, agentes de migración y traficantes de humanos— en Quintana Roo en el 2007.

El año con más cubanos ejecutados. Según las investigaciones de la Procuraduría General de la República los cubanos ejecutados formaban parte de un grupo, con residencia o familiares en Miami, Florida, dedicados desde al tráfico de ciudadanos de la isla equipados. Todos ellos equipados con potentes lanchas de dos o tres motores fuera de borda.

El asesinato del cubano Humberto Febles Santana en marzo de 2008 fue el final de la primera etapa de los nuevos inquilinos en la comunidad de cubanos en Quintana Roo. La segunda se inicia justo ese año al asumir Gregorio Sánchez Martínez, nacido en Guerrero pero criado en Chiapas, la presidencia municipal de Benito Juárez, Quintana Roo.

Silencio en La Habana

Nadie quiere hablar de Gregorio Sánchez Martínez, ex presidente municipal de Benito Juárez (Cancún): funcionarios del gobierno cubano esquivan el tema; diplomáticos mexicanos culpan al tiempo y sus agendas; y los personeros que lo conocieron en la zona del Vedado simplemente se han vuelto invisibles.

Asiduo visitante de la isla, Gregorio Sánchez Martínez, el ex candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al gobierno de Quintana Roo, dejo pocas huellas en una ciudad a la que viajaba cotidianamente desde del años 2000 para “hacer negocios, principalmente de los llamados giros negros”, dice Ricardo de los Santos, un mexicano dedicado a contratar grupos musicales y bailarinas para una empresa en la Ciudad de México.

Sus primeros vínculos en La Habana , comenta el empresario mexicano, fue con músicos y personajes del espectáculo. Ricardo dejó de tener contacto con el ex alcalde en el 2006. Las últimas dos veces que lo vieron en la Habana fue en el año 2008, cuando ya era alcalde de Cancún y su romance con Niurka Sáliba Benítez caminaba viento en popa.

Estuvo en La Habana en el primer semestre del 2008 en una reunión con empresarios del espectáculo. La segunda ocasión, a fines de noviembre del mismo año en la Casa Benito Juárez, enclavada en una construcción de finales del siglo XVIII en el Centro Histórico de la Ciudad de La Habana , en una exposición colectiva de artistas plásticos: “Cancún Art”.

En el Ministerio de Cultura se negaron a ofrecer información sobre la relación que mantenían con el gobierno municipal de Benito Juárez.

“No podemos dar información sobre nuestros proyectos con ningún gobierno. Sólo te puedo decir que con Cancún venimos trabajando desde hace muchos años, no es nueva la relación”, comentó uno de los funcionarios que dejo en claro que no era una entrevista.

La aprehensión de Gregorio Sánc hez no es un tema que interese al gobierno cubano, tampoco que la esposa del ex candidato al gobierno de Quintana Roo, la cubana Niuka Sábila, haya intentado involucrar a la isla en el escándalo.

El silencio sobre el caso es de total. El Ministerio de Relaciones Exteriores no tiene dentro de su agenda la posibilidad de referirse al tema. Una fuente fidedigna de la cancillería deslindó a Cuba de “cualquier intento de involucrar” al país en un hecho en el que “no tenemos nada”.

“Somos respetuosos de los asuntos internos de México. Tenemos un gran respeto por los mexicanos y sus leyes.

Cuba no hará ningún pronunciamiento porque consideramos un problema interno de México y en donde Cuba simplemente no tienen ningún vínculo, desconocemos lo que pasa ahí”, aseguró.

Para los medios de comunicación cubanos tampoco existe el caso de Gregorio Sánchez, acusado de tener vínculos con el narcotráfico, lavado de dinero y el tráfico de cubanos, chinos y rusos.

El juicio de Mario Villanueva

El pasado 23 de julio inició en una Corte Federal de Nueva York, Estados Unidos, el juicio contra el ex gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva Madrid, acusado, al igual que Gregorio Sánchez Greg, de tráfico de drogas y lavado de dinero.

Villanueva Madrid, quien fuera presidente municipal de Benito Juárez (Cancún) y gobernador de Quintana Roo, fue extraditado a Estados Unidos el 10 de mayo de 2010, acusado de aceptar millones de dólares en sobornos por parte del cártel de Juárez y podría ser condenado a cadena perpetua por acusaciones de narcotráfico y 20 años de prisión por los cargos de lavado de dinero.

El juicio en la Corte Federal de Nueva York en contra del ex gobernador de Quintana Roo podría involucrar a Cuba por los vínculos que sostuvo el ex ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Roberto Robaina, con Villanueva.

Robaina, un carismático ex dirigente de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) fue destituido hace once años (1999) acusado por el gobierno cubano de haber recibido dinero y dádivas (viajes en aviones particulares) por parte del ex gobernador Mario Villanueva.

También se le acusó de autopromocionarse como candidato de una futura transición política en Cuba, tras revelarse una conversación telefónica entre Robaina y el ex canciller español Abel Matutes, en abril de 1998.

Hasta el momento no existen pruebas que involucren a Cuba con el ex gobernador Mario Villanueva Madrid y ni con el ex candidato del PRD al gobierno de Quintana Roo, Gregorio Sánchez Martínez.

Con la detención de Sánchez Martínez, suman cuatro los alcaldes de Cancún que han pisado la cárcel por diferentes delitos: Arturo Contreras Castillo, Ignacio García Zalvidea, Mario Villanueva Madrid y Gregorio Sánchez Martínez. Fin.