viernes, 23 de octubre de 2009

Libres, las jóvenes involucradas en narcotráfico

Ja­net y Lu­cía Acos­ta Hues­ca, vin­cu­la­das con el ase­gu­ra­mien­to de 30 ki­los de co­caí­na, vi­vie­ron du­ran­te más de sie­te años en el frac­cio­na­mien­to Fo­visss­te III Eta­pa. Sin em­bar­go, tras­cen­dió que cuen­tan con cua­tro ca­sas en Che­tu­mal, in­mue­bles que se pre­su­me, uti­li­za­ban pa­ra ven­der o al­ma­ce­nar dro­ga, por lo que es­tán sien­do ubi­ca­das por agen­tes fe­de­ra­les.

En­tre tan­to, las jó­ve­nes Geo­va­na Re­yes Acos­ta y Ta­nia Ra­quel Sau­ce­do Flo­res, de­te­ni­das el mis­mo día en que la dro­ga fue ase­gu­ra­da, fue­ron li­be­ra­das por la Pro­cu­ra­du­ría Ge­ne­ral de la Re­pú­bli­ca lue­go de ser so­me­ti­das a in­te­rro­ga­to­rio. Am­bas mu­je­res es­ta­ban en ca­li­dad de pre­sen­ta­das, pe­ro fue­ron pues­tas en li­ber­tad co­mo tes­ti­gos en el ca­so.

En es­te con­tex­to, se pu­do co­no­cer que ade­más de los pre­dios mar­ca­dos con los nú­me­ros 45 y 47 de la ca­lle Pri­va­da Ru­fo Fi­gue­roa de la men­cio­na­da co­lo­nia, don­de po­li­cías fe­de­ra­les ha­lla­ron el car­ga­men­to de al­ca­loi­de den­tro de una ca­mio­ne­ta el pa­sa­do mar­tes, la sub­de­le­ga­ción de la Pro­cu­ra­du­ría Ge­ne­ral de la Re­pú­bli­ca ase­gu­ró otra ca­sa vin­cu­la­da a la fa­mi­lia, es­ta, ubi­ca­da en el An­da­dor Oa­xa­ca nú­me­ro 531.

Has­ta el mo­men­to se sa­be que Ja­net y Lu­cía Acos­ta lle­ga­ron a Che­tu­mal ha­ce po­co más de 20 años, lue­go de pa­sar su ado­les­cen­cia en Ve­ra­cruz, aun­que am­bas son ori­gi­na­rias de un po­bla­do de Cam­pe­che. Pos­te­rior­men­te lle­gó a la ca­pi­tal de Quin­ta­na Roo, Víc­tor Hu­go, her­ma­no de am­bas mu­je­res, quien só­lo pa­só una tem­po­ra­da en la lo­ca­li­dad an­tes de mu­dar­se a una co­mu­ni­dad de la Ri­be­ra del Río Hon­do.

Dos años más tar­de, Ja­net Acos­ta co­no­ció a An­to­nio Re­yes Ca­ba­ñas, con quien en­gen­dró a Geo­van­na Re­yes, quien en la ac­tua­li­dad cuen­ta con 18 años de edad y cur­sa el ba­chi­lle­ra­to en un co­le­gio de es­ta ca­pi­tal, la cual era vis­ta fre­cuen­te­men­te con Ta­nia Ra­quel Sau­ce­do Flo­res, a bor­do de un co­che ti­po Bea­tle, co­lor ama­ri­llo.

Es­ta uni­dad era es­col­ta­da siem­pre por un au­to­mó­vil Chevy, co­lor azul, con pla­cas de cir­cu­la­ción de Quin­ta­na Roo, cu­yos tri­pu­lan­tes eran dos hom­bres de es­ta­tu­ra me­dia, tez mo­re­na y com­ple­xión ro­bus­ta.

Es­tas ado­les­cen­tes fue­ron de­te­ni­das el pa­sa­do mar­tes en el do­mi­ci­lio mar­ca­do con el nú­me­ro 45, don­de se pre­su­me al­ma­ce­nan más dro­ga, co­mo par­te del car­ga­men­to ha­lla­do en una ca­mio­ne­ta Ni­tro, co­lor blan­co, con pla­cas UVY-7276, ve­hí­cu­lo re­gis­tra­do a nom­bre de Ja­net Acos­ta.

Las ado­les­cen­tes fue­ron in­te­rro­ga­das ex­haus­ti­va­men­te en la Sub­de­le­ga­ción de la Pro­cu­ra­du­ría Ge­ne­ral de la Re­pú­bli­ca, pe­ro ayer por la tar­de fue­ron pues­tas en li­ber­tad, aun­que per­so­nal fe­de­ral las vi­gi­la de ma­ne­ra per­ma­nen­te, ya que es­tán en ca­li­dad de tes­ti­gos, pe­ro su es­ta­tus le­gal po­dría cam­biar con­for­me evo­lu­cio­ne el ca­so.

Los de­ta­lles de los tes­ti­mo­nios de es­tas jó­ve­nes se man­tie­nen ba­jo com­ple­to her­me­tis­mo, pues se te­me que si es­ta in­for­ma­ción es di­vul­ga­da pue­da afec­tar las in­da­ga­to­rias y las di­li­gen­cias pro­gra­ma­das pa­ra las pró­xi­mas ho­ras.

Sin em­bar­go, se su­po que las prue­bas rea­li­za­das a las vi­vien­das por per­so­nal de la Ar­ma­da de Mé­xi­co, con un mo­der­no apa­ra­to co­no­ci­do co­mo Ion Scan­ner, de­ter­mi­na­ron que só­lo la ca­sa nú­me­ro 47 de la ca­lle Pri­va­da Ru­fo Fi­gue­roa hay par­tí­cu­las de co­caí­na y pól­vo­ra, por lo que se cree que pu­die­ra ha­ber más al­ca­loi­des en el in­mue­ble.

Es­tos re­sul­ta­dos fue­ron in­te­gra­dos en la so­li­ci­tud que le fue en­via­da a un juez de Con­trol en la Ciu­dad de Mé­xi­co, pa­ra que exa­mi­ne el ca­so y li­be­re ór­de­nes de ca­teo pa­ra al me­nos tres in­mue­bles, dos de los cua­les es­tán ubi­ca­dos en la ca­lle Pri­va­da Ru­fo Fi­gue­roa.

Mien­tras tan­to, las au­to­ri­da­des fe­de­ra­les, es­ta­ta­les y mi­li­ta­res es­tán bus­can­do a las her­ma­nas Acos­ta Hues­ca, las cua­les se cree que no han aban­do­na­do te­rri­to­rio quin­ta­na­rroen­se.

Ca­be men­cio­nar que las ca­sas de Ja­net y Lu­cía Acos­ta son vi­gi­la­das de ma­ne­ra per­ma­nen­te por una do­ce­na de Po­li­cías Es­ta­ta­les y per­so­nal de la Agen­cia Fe­de­ral de In­ves­ti­ga­cio­nes, quie­nes re­vi­sa­ron a al­re­de­dor de 20 au­to­mo­vi­lis­tas que cir­cu­la­ban por la zo­na de ma­ne­ra sos­pe­cho­sa, aun­que has­ta el cie­rre de es­ta edi­ción, no ha­bían efec­tua­do de­ten­ción al­gu­na.

Sale libre Yasuri Sac-Nicté después de 10 dias recluida

23 de Octubre del 2009 por dgallegos

Por Omar Capistran Espinosa

Chetumal, Q. Roo, 23 de octubre.- Después de permanecer 10 días recluida en el Centro de Readaptación Social de la capital de Quintana Roo bajo el supuesto delito de homicidio doloso calificado, la tarde de este viernes, a las 13:45, Yasuri Sac-Nicté Pool salio libre debido a que la Procuraduría General de justicia del Estado no encontró más elementos para continuar con su detención, mucho menos para desarrollar una querella.

Al respecto, la abogada defensora de la joven de origen maya, Gabriela Rojo, indicó que sorpresivamente, el procurador Bello Melchor, en su figura de primer abogado de Quintana Roo, realizó una revisión del caso de Yasuri y determinó que el caso se encontraba mal integrado en la averiguación previa, desistiéndose del ejercicio de la acción penal.


La litigante subrayó que era cuestión de tiempo para que esto sucediera, pues desde el principio se indicó que existían violaciones en la integración del expediente, así como claras faltas a sus derechos humanos.

“El Procurador, en su carácter de Ministerio Público se desiste de la acción penal y se da el sobreseimiento natural del asunto, me notifican e inmediatamente solicito la libertad de Yasuri, la cual se da exactamente a las 13:45”, dijo.

Gabriela Rojo enfatizó que se trata de un precedente nacional que deja entrever que el Estado realmente se encuentra del lado de las mujeres, protegiendo sus derechos y velando por la igualdad de género.

La jurista recalcó que las autoridades deben brindar mayor información sobre las leyes modificadas y en su defecto, mejor asistencia social, pues desgraciadamente y ante las lagunas que deja la recientemente aprobada “ley por la vida”, el caso de Yasuri Sac-nicté seguramente no será el último de esta índole.

Visiblemente contrariada, después de 10 días de permanecer recluida, Yasuri se limitó únicamente a mencionar que se encontraba “sumamente contenta, pues la vida le daba una nueva oportunidad para salir adelante”.

Cabe recordar que el 12 de octubre, Yasuri Sac-Nicté Pool acudió de urgencia al hospital materno de Chetumal debido a una hemorragia. Minutos antes había muerto su bebé de casi siete meses de gestación motivo por el que fue encarcelada.

Se le acusaba de homicidio doloso calificado, delito que se sanciona hasta con 30 años de cárcel, según el Código Penal de Quintana Roo.

La madrugada del 12 de octubre, la joven acudió de urgencia al hospital materno de Chetumal para que la atendieran por una hemorragia. Minutos antes había muerto su bebé de casi siete meses de gestación.

Madre soltera de una niña de año y medio, y de un menor de 5 años, fue acusada y recluida en el Centro de Readaptación Social de Chetumal.

La Procuraduría de Justicia la consignó por la muerte del neonato en su vivienda en la comunidad rural de Sabidos, municipio de Othón P. Blanco.