La abogada Lucha Castro recordó que la Fiscalía de Chihuahua ya había dado el nombre de otros dos presuntos asesinos de la activista.
México
A unas horas de que el gobierno de Chihuahua presentara a José Enrique Jiménez Zavala , alias “El Wicked”, como el supuesto asesino de Marisela Escobedo, la abogada de la activista asesinada puso en duda la versión de la Fiscalía del estado, quien antes ya había identificado a dos diferentes presuntos homicidas.
En entrevista con Radio Red, la abogada recordó que “el fiscal Salas declaró públicamente que el asesino era Sergio Rafael, posteriormente, el 15 de diciembre de 2011, Carlos González, que es el vocero de la Fiscalía, declaró que un sujeto que se llama Héctor Manuel Flores Morán, alías ‘El Payaso’, era el autor material del feminicidio”.
En ese sentido, expresó que cuando, según la fiscalía, ya se tenía a un autor material, ahora, a dos meses de que se cumplan dos años del asesinato, “tenemos una tercera versión de la Fiscalía con otro sujeto totalmente diferente” y aseguró que “lo primero que tendría que hacer la Fiscalía y el Gobierno de Chihuahua es decir cuáles fueron los elementos científicos para tener ahora otra versión totalmente diferente con objetivos diferentes y móviles diferentes”.
“No estoy exonerando a nadie, pero sí es bastante confuso que ahora presentan a nuevos sujetos cuando ya los teníamos antes por dicho de la Fiscalía (…) al menos hay tres diferentes versiones y solamente hay una línea de investigación”, aclaró Lucha Castro.
El gobierno de Chihuahua anunció ayer la detención de “El Wicked”, identificado como el presunto homicida de la activista Marisela Escobedo, asesinada en las puertas de Palacio de Gobierno de la capital de ese estado en diciembre de 2010 cuando exigía justicia por el homicidio de su hija.
El “Wicked” fue detenido por agentes de la Policía Única División Preventiva el jueves 4 de octubre en el estacionamiento de un centro comercial, ubicado en las avenidas Haciendas del Valle y Periférico de la Juventud.
El indiciado, quien estaba en posesión de un arma de fuego calibre 38 súper, tripulaba una camioneta Ford Sport Track, y lo acompañaban su esposa, dos hijos, y Luis Alberto Camacho Ramos, alias el “Toker y/o “Mexican”, a quien se le aseguró un arma de fuego calibre nueve milímetros y un cargador abastecido con 13 cartuchos útiles.
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