Isidoro Raya Benítez |
El Ejército mexicano ubicó ayer en el ejido de Xul-Ha un narco-cementerio, en un predio propiedad del ex agente judicial Isidoro Raya Benítez, alias "El Raya", presunto líder de Los Zetas en la Zona Sur del Estado.
A través de la denuncia de una adolescente, quien fue liberada luego de varias semanas de estar secuestrada, se encontró el lugar, donde ayer fue desenterrado el cadáver, que presentaba el tiro de gracia, de un presunto delincuente identificado solamente como "Quijano", ejecutado por "portarse mal" y por instrucciones del citado líder delictivo.
Hay que mencionar que dos hombres y una mujer están a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR) por su presunta responsabilidad en los hechos, los cuales ya son investigados por mencionada dependencia federal y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
LOS HECHOS
Durante la madrugada de ayer domingo, elementos del Ejército mexicano, al mando del comandante de la 34ª Zona Militar, General de Brigada Diplomado de Estado Mayor, Anastacio García Rodríguez, atendieron el reporte de una adolescente de 17 años de edad, quien aseguraba estaba secuestrada en una casa de seguridad en la colonia Proterritorio.
De inmediato los efectivos castrenses establecieron un operativo y en la vivienda situada en la calle Jacinto Pat con Chablé rescataron sana y salva a la adolescente, quien los llevó hasta el hotel Ucum, situado en la calle Mahatma Gandhi con 16 de Septiembre, en la colonia Centro.
La joven condujo a los militares a una de las habitaciones, donde aparentemente estaban sus presuntos captores. En el lugar lograron detener a dos hombres, uno de 40 años de edad y otro de 20, así como a una mujer, quienes tenían en posesión 78 dosis de mariguana, dos cajas con 40 cartuchos útiles calibre .223 para R-15, así como 64 mil 500 pesos en efectivo que tenían ocultos en el baño del centro de hospedaje.
Los nombres de los presuntos secuestradores y la mujer detenidos en el hotel son Miguel Angel Díaz Tornes y Miguel Angel Díaz Dorantes, aparentemente padre e hijo. La mujer dijo que se llama Laura Díaz Magaña.
Estas tres personas fueron puestas a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación, como presuntos responsables de delitos contra la salud, portación de cartuchos exclusivos de las fuerzas federales y lo que resulte.
Sin embargo, hay que dejar en claro que la Procuraduría de Justicia del Estado los investiga como presuntos responsables del asesinato de "Quijano".
ADOLESCENTE NARRA EJECUCION DE QUIJANO
Al ser interrogada, la adolescente narró a los militares que ella presenció la ejecución de uno de los delincuentes, en un paraje solitario situado a un costado de la carretera entre Xul-Ha y Bacalar, informando que ella fue testigo cuando los dos sujetos detenidos en el hotel Ucum le dispararon en siete ocasiones a "Quijano" y posteriormente le dieron "el tiro de gracia".
La mañana de ayer la joven dirigió a los militares a un camino de terracería que se sitúa a un costado de la carretera entes mencionada, a la altura del kilómetro 10, frente al balneario popular Zac-Ha, y tras recorrer más de 15 kilómetros los condujo a una zona llena de maleza, donde se pudo observar un área despejada y señaló que en ese lugar estaba enterrado el cuerpo del hombre ejecutado hace más de dos semanas.
Los militares observaron que en la zona despejada, a cielo abierto estaba un húmero, un radio y cúbito, y tras excavar algunos centímetros de una fosa hallaron el cráneo del ejecutado, el cual ya estaba en estado de descomposición, con la piel acartonada.
GENERAL DA PARTE AL PROCURADOR DE JUSTICIA
El jefe militar al confirmar este hecho dio parte al procurador general de Justicia, Gaspar Armando García Torres, con quien se coordinó para enviar al personal correspondiente para las diligencias conducentes.
A las 16:00 horas un convoy del Ejército mexicano, al mando del General Anastacio García, seguido de cerca por los directores de Averiguaciones Previas y Policía Judicial, Angel Francisco Torres Fritz y Luis Manuel Vázquez Villanueva, respectivamente, se dirigió al sitio acompañado de personal de Servicios Periciales.
El camino sinuoso y la lluvia ocasionaron que el trayecto pareciera más largo de lo que en realidad es, y ya en el lugar, tras más de cuatro horas, se rescataron los restos de Quijano, mismos que fueron trasladados al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo).
Vale la pena señalar que en el predio en cuestión se observaron varios montículos de tierra que asemejan ser fosas donde están enterrados otros cuerpos de presuntos delincuentes ejecutados por órdenes de Isidoro Raya Benítez.
Para continuar con el trabajo, pues ya había anochecido cuando se rescató el primer cuerpo, el personal de la PGJE llevó hasta ese sitio plantas generadoras de energía eléctrica, para continuar con las pesquisas.
Y es que en el lugar se reconoció que es real la posibilidad de que existan más cuerpos enterrados en esa zona en un radio amplio, ya que entre la maleza se podían observar zonas limpias y montículos de tierra.
El representante social inició una averiguación por el delito de homicidio calificado contra quienes resulten responsables.
La búsqueda de posibles cuerpos en ese sitio continuará hoy lunes, porque de acuerdo con las declaraciones de los tres detenidos, podría haber más cadáveres enterrados.
POLICIA JUDICIAL INVESTIGABA SECUESTRO
La Policía Judicial del Estado, de acuerdo con las indagatorias realizadas por el reportero, tuvo conocimiento de la desaparición de la adolescente gracias a la denuncia de su madre, a quien solamente identificaremos como "Rubí", originaria del Estado de Guerrero.
Según los datos, la mujer señaló que hace aproximadamente cuatro semanas su hija -de quien las autoridades por motivos de seguridad no proporcionaron nombre-, de 17 años de edad, desapareció luego de asistir al funeral de un familiar en el Estado de Oaxaca y días después recibieron una llamada en la que le exigieron una fuerte suma de dinero para dejar libre a su hija, a quien tenían secuestrada en Chetumal.
Pero la denuncia oportuna de la joven al número de llamadas anónimas 089 alertó a los militares, quienes lograron rescatarla sana y salva la madrugada del domingo en la colonia Proterritorio.
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