* La Procuraduría de Campeche informó que entre los apresados hay dos originarios de Miguel Alemán, Quintana Roo, pero que habían cambiado su residencia a Punta Xen, en el municipio de Champotón, Campeche
* Hay tres sospechosos más que no han sido capturados
* El ajusticiamiento fue en el paraje Cuatro Mil, del municipio de Hopelchén
Redacción/Daniel Sánchez
CAMPECHE, CAMPECHE, 27 de mayo.- El procurador general de Justicia del Estado, Juan Manuel Herrera Campos, confirmó que las cinco personas incineradas, halladas en la zona limítrofe de Campeche con Quintana Roo, eran campechanos, entre ellos los dos empleados del Tribunal Unitario Agrario (TUA), Miguel Alberto Uc Cámara y Pedro Mosqueda Aguayo, e informó que ya atraparon a cuatro de los siete homicidas.El funcionario estatal afirmó que también que el móvil de la multiejecución fue la disputa de alrededor de mil hectáreas de tierras aledañas a la Laguna Ik, en el paraje conocido como Cuatro Mil, en el municipio de Hopelchén, donde fueron cometidos los asesinatos, y descartó de manera precipitada que el hecho violento esté relacionado con el narcotráfico o con el crimen organizado, aunque en el estado de Campeche se ha generalizado la presencia de “Los Zetas” y la zona de Quintana Roo, donde fueron hallados los cadáveres es controlada por el cártel de Sinaloa.Sin embargo, versiones oficiales cercanas a la investigación en Quintana Roo, confirmaron que las ejecuciones ocurridas, fueron producto de la disputa por terrenos que controlan diversas organizaciones del narcotráfico en Campeche y la vecina entidad, mismos que protegen el arribo de aeronaves que trasladan cargamentos de drogas en esos parajes. La disputa por zonas altamente penetradas por el narcotráfico derivó en esas ejecuciones, dijeron fuentes oficiales cercanas a las investigaciones.En tanto, en la mencionada conferencia de prensa, acompañado del secretario estatal de Seguridad Pública, Carlos Miguel Aysa González, y el comisario de la Policía Federal Preventiva (PFP) en Campeche, Javier Gutiérrez Cruz, Herrera Campos precisó que, aparte de Uc Cámara y Mosqueda Aguayo, también fueron asesinados sus acompañantes Juan Ramón Herrera Ramos, de 46 años; Juan José Herrera López, de 24 años, y José Eduardo Gasca Balán, de 36 años, todos originarios de la capital campechana.Dio a conocer la detención y arraigo del apicultor Raymundo Rojas Silva, alias “El Mundo”, de 34 años, originario de San Miguel Solá de la Vega, Oaxaca, y vecino de Dzibalchén, municipio de Hopelchén; el campesino Manuel Delfino Morales Ramos, alias “El Delfino”, de 19 años, originario del mismo lugar de Oaxaca y vecino de Dzibalchén.Entre los detenidos hay dos originarios de Quintana Roo: el campesino Julio Olán Lázaro, alias “El Julio”, de 19 años, quien es originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino de Punta Xen, Champotón, y José Olán Lázaro, alias “El Pepe”, de 20 años, originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino también de Punta Xen.Estos detenidos revelaron que hay otros involucrados en la ejecución de los cinco campechanos y que actualmente están prófugos, entre ellos Rafael Bonilla Maldonado, alias “El Gato”, quien es considerado de “alta peligrosidad” líder y autor intelectual del multihomicidio.También falta por aprehender a Gustavo Olán Lázaro, alias “El Tavo”, quien es originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino de Punta Xen, Champotón, y a un sujeto que sólo es referido como “El Vale”, quien recibió un balazo de las víctimas y está herido de gravedad, por lo que se cree que ya pudo haber muerto.Desde el año 2004, como documentó POR ESTO!, llegaron invasores de otros estados del país, entre ellos Chiapas y Veracruz, a ocupar las tierras aledañas a la Laguna Ik, desmontaron decenas de hectáreas de selva y se asentaron con un gran criadero de dos mil borregos en los alrededores. El 23 de junio de ese año, se realizó un operativo de desalojo por la Procuraduría General de la República, pero los invasores fueron avisados y abandonaron, junto con sus animales, el lugar. Sólo fueron encontrados dos ancianos y sus dos hijos, originarios de Veracruz, y un gran Cristo de 30 metros que en su corona tenía equipo electrónico para facilitar la radiocomunicación satelital, por lo que se sospechó que servían a las bandas del narcotráfico que aterrizaban avionetas en la zona limítrofe. Incluso, en esas fechas, el Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía reportó un narcoaterrizaje sobre la carretera Dzibalchén-Xpujil, muy cerca de la entrada a Bel-Há, que comunica también con la Laguna Ik y Miguel Alemán. -- Dicen que los cinco ejecutados los agredieron primero
En la rueda de prensa nocturna, el procurador campechano mencionó que la localización y la detención de los cuatro homicidas fue el resultado del trabajo de investigación entre las dos Procuradurías, la de Campeche y la de Quintana Roo, “así como de la búsqueda y seguimiento en los terrenos de los hechos, efectuados por personal del Ejército Mexicano, la Secretaría de Marina, la Policía Federal Preventiva y por supuesto, por la Policía Estatal Preventiva, la destacamentada en Hopelchén y la Policía Ministerial”.
Reveló que de la investigación y de las declaraciones vertidas de los cuatro detenidos, “se puede determinar que el lugar del múltiple crimen es un paraje denominado Cuatro Mil, Hopelchén, aledaño a la Laguna de Ik”, además de que los sujetos dieron la versión de que las muertes ocurrieron en un enfrentamiento armado, para librarse de los cargos de haberlos ejecutado.
“Los hechos se perpetraron el 23 de mayo del 2009, a las 9:30 horas; como ya lo habíamos comentado y ahora lo podemos confirmar, el motivo de este encuentro infructuoso con estas personas es una disputa que hay por terrenos propiedad de la señora Martha Elena Novelo Ramos, y que estos dos grupos se encontraban en disputa de los mismos”, indicó.
“Relatan precisamente los hoy probables responsables que ya habían tenido una serie de encuentros, discusiones y amenazas mutuas con los hoy occisos, principalmente con Pedro Mosqueda Aguayo y que el día de los hechos, ya los esperaban y que habían conseguido armas de fuego previamente, para efecto de hacerles frente y evitar que siguieran con su afán de desalojarlos de los predios”, agregó.
“Es así que en un primer encuentro que tienen estas personas en el lugar donde tenían los invasores sus casas (champas), se hacen de palabras y un individuo con el nombre de “Don Vale”, único dato que tenemos de él, de aproximadamente 56 años de edad, baja de una camioneta tipo estaquitas, propiedad de los invasores y amenaza con un rifle calibre .223 a Pedro Mosqueda, quien a su vez portaba una pistola calibre .357, haciendo un primer intercambio de tiros, en el cual resulta muerto Pedro Mosqueda Aguayo y Miguel Ángel Uc Magaña, y “Don Vale” resulta herido de gravedad”, apuntó.
Dijo que “las otras tres personas que iban en la cama de la camioneta Silverado, de color rojo, que ha sido también confirmado por la Procuraduría de Quintana Roo que es propiedad del Tribunal Unitario Agrario, con sede en Chetumal, intentan huir, pero son perseguidos por los agresores, quienes les dieron alcance y fueron golpeados con diversos objetos contundentes y efectuándoles también disparos calibre .223”.
Posteriormente, abundó, los suben a la cama de la propia camioneta involucrada en los hechos, trasladándolos hasta el ejido Miguel Alemán, donde los ingresaron al rancho “Los Pericos”, y les prendieron fuego.
Juan Manuel Herrera manifestó que tuvieron conocimiento de la identificación de los otros tres calcinados por denuncia de sus familiares, quienes en las últimas horas, acudieron a la Procuraduría de Campeche a quejarse de la desaparición de sus parientes y ahora, viajaron a Chetumal, Quintana Roo, a reclamar los cuerpos.
“Hay testimonios de los vecinos y familiares, que aseguran haberlos visto abordar la camioneta roja, propiedad del Tribunal Unitario Agrario, precisamente en las primeras horas de la mañana del día sábado”, añadió.
Comentó también que solicitaron “a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Quintana Roo, el día de hoy por la mañana, ya con los elementos que contábamos, que nos concediera la incompetencia a favor de esta Procuraduría, por tener comprobado que los hechos ocurrieron precisamente en jurisdicción del estado de Campeche”.
“Ya se encuentra de nueva cuenta personal de esta Procuraduría en la ciudad de Chetumal, Quintana Roo, en donde en las próximas horas se terminará de recibir, no nada más los cadáveres, sino también los demás objetos y elementos que conforman la averiguación previa, que en su momento iniciara la Procuraduría de Quintana Roo, para proseguir nosotros aquí en Campeche, con las investigaciones correspondientes”, expresó.
“También el día de hoy en la tarde, el juez competente del ramo penal nos ha concedido el arraigo de estos cuatro individuos, por lo que se continuará con las investigaciones hasta llegar a esclarecer completamente todos los elementos necesarios para la integración de la averiguación previa y en los próximos días, serán consignados”, puntualizó.
El procurador citó también que la Secretaría Estatal de Seguridad Pública reconoció que Pedro Mosqueda Aguayo trabajaba en esa dependencia “hasta el momento de su fallecimiento y desde el año del 2002, en el área administrativa, cubriendo los turnos de los fines de semana y días festivos”.
“Hay que aclarar, no era policía y no tenía un arma asignada, no estaba dado de alta en la licencia oficial colectiva y no se encontraba en ese momento participando en una cuestión oficial, muy al contrario, había faltado a sus labores”, aclaró.
* Hay tres sospechosos más que no han sido capturados
* El ajusticiamiento fue en el paraje Cuatro Mil, del municipio de Hopelchén
Redacción/Daniel Sánchez
CAMPECHE, CAMPECHE, 27 de mayo.- El procurador general de Justicia del Estado, Juan Manuel Herrera Campos, confirmó que las cinco personas incineradas, halladas en la zona limítrofe de Campeche con Quintana Roo, eran campechanos, entre ellos los dos empleados del Tribunal Unitario Agrario (TUA), Miguel Alberto Uc Cámara y Pedro Mosqueda Aguayo, e informó que ya atraparon a cuatro de los siete homicidas.El funcionario estatal afirmó que también que el móvil de la multiejecución fue la disputa de alrededor de mil hectáreas de tierras aledañas a la Laguna Ik, en el paraje conocido como Cuatro Mil, en el municipio de Hopelchén, donde fueron cometidos los asesinatos, y descartó de manera precipitada que el hecho violento esté relacionado con el narcotráfico o con el crimen organizado, aunque en el estado de Campeche se ha generalizado la presencia de “Los Zetas” y la zona de Quintana Roo, donde fueron hallados los cadáveres es controlada por el cártel de Sinaloa.Sin embargo, versiones oficiales cercanas a la investigación en Quintana Roo, confirmaron que las ejecuciones ocurridas, fueron producto de la disputa por terrenos que controlan diversas organizaciones del narcotráfico en Campeche y la vecina entidad, mismos que protegen el arribo de aeronaves que trasladan cargamentos de drogas en esos parajes. La disputa por zonas altamente penetradas por el narcotráfico derivó en esas ejecuciones, dijeron fuentes oficiales cercanas a las investigaciones.En tanto, en la mencionada conferencia de prensa, acompañado del secretario estatal de Seguridad Pública, Carlos Miguel Aysa González, y el comisario de la Policía Federal Preventiva (PFP) en Campeche, Javier Gutiérrez Cruz, Herrera Campos precisó que, aparte de Uc Cámara y Mosqueda Aguayo, también fueron asesinados sus acompañantes Juan Ramón Herrera Ramos, de 46 años; Juan José Herrera López, de 24 años, y José Eduardo Gasca Balán, de 36 años, todos originarios de la capital campechana.Dio a conocer la detención y arraigo del apicultor Raymundo Rojas Silva, alias “El Mundo”, de 34 años, originario de San Miguel Solá de la Vega, Oaxaca, y vecino de Dzibalchén, municipio de Hopelchén; el campesino Manuel Delfino Morales Ramos, alias “El Delfino”, de 19 años, originario del mismo lugar de Oaxaca y vecino de Dzibalchén.Entre los detenidos hay dos originarios de Quintana Roo: el campesino Julio Olán Lázaro, alias “El Julio”, de 19 años, quien es originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino de Punta Xen, Champotón, y José Olán Lázaro, alias “El Pepe”, de 20 años, originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino también de Punta Xen.Estos detenidos revelaron que hay otros involucrados en la ejecución de los cinco campechanos y que actualmente están prófugos, entre ellos Rafael Bonilla Maldonado, alias “El Gato”, quien es considerado de “alta peligrosidad” líder y autor intelectual del multihomicidio.También falta por aprehender a Gustavo Olán Lázaro, alias “El Tavo”, quien es originario de Miguel Alemán, Quintana Roo, y vecino de Punta Xen, Champotón, y a un sujeto que sólo es referido como “El Vale”, quien recibió un balazo de las víctimas y está herido de gravedad, por lo que se cree que ya pudo haber muerto.Desde el año 2004, como documentó POR ESTO!, llegaron invasores de otros estados del país, entre ellos Chiapas y Veracruz, a ocupar las tierras aledañas a la Laguna Ik, desmontaron decenas de hectáreas de selva y se asentaron con un gran criadero de dos mil borregos en los alrededores. El 23 de junio de ese año, se realizó un operativo de desalojo por la Procuraduría General de la República, pero los invasores fueron avisados y abandonaron, junto con sus animales, el lugar. Sólo fueron encontrados dos ancianos y sus dos hijos, originarios de Veracruz, y un gran Cristo de 30 metros que en su corona tenía equipo electrónico para facilitar la radiocomunicación satelital, por lo que se sospechó que servían a las bandas del narcotráfico que aterrizaban avionetas en la zona limítrofe. Incluso, en esas fechas, el Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía reportó un narcoaterrizaje sobre la carretera Dzibalchén-Xpujil, muy cerca de la entrada a Bel-Há, que comunica también con la Laguna Ik y Miguel Alemán. -- Dicen que los cinco ejecutados los agredieron primero
En la rueda de prensa nocturna, el procurador campechano mencionó que la localización y la detención de los cuatro homicidas fue el resultado del trabajo de investigación entre las dos Procuradurías, la de Campeche y la de Quintana Roo, “así como de la búsqueda y seguimiento en los terrenos de los hechos, efectuados por personal del Ejército Mexicano, la Secretaría de Marina, la Policía Federal Preventiva y por supuesto, por la Policía Estatal Preventiva, la destacamentada en Hopelchén y la Policía Ministerial”.
Reveló que de la investigación y de las declaraciones vertidas de los cuatro detenidos, “se puede determinar que el lugar del múltiple crimen es un paraje denominado Cuatro Mil, Hopelchén, aledaño a la Laguna de Ik”, además de que los sujetos dieron la versión de que las muertes ocurrieron en un enfrentamiento armado, para librarse de los cargos de haberlos ejecutado.
“Los hechos se perpetraron el 23 de mayo del 2009, a las 9:30 horas; como ya lo habíamos comentado y ahora lo podemos confirmar, el motivo de este encuentro infructuoso con estas personas es una disputa que hay por terrenos propiedad de la señora Martha Elena Novelo Ramos, y que estos dos grupos se encontraban en disputa de los mismos”, indicó.
“Relatan precisamente los hoy probables responsables que ya habían tenido una serie de encuentros, discusiones y amenazas mutuas con los hoy occisos, principalmente con Pedro Mosqueda Aguayo y que el día de los hechos, ya los esperaban y que habían conseguido armas de fuego previamente, para efecto de hacerles frente y evitar que siguieran con su afán de desalojarlos de los predios”, agregó.
“Es así que en un primer encuentro que tienen estas personas en el lugar donde tenían los invasores sus casas (champas), se hacen de palabras y un individuo con el nombre de “Don Vale”, único dato que tenemos de él, de aproximadamente 56 años de edad, baja de una camioneta tipo estaquitas, propiedad de los invasores y amenaza con un rifle calibre .223 a Pedro Mosqueda, quien a su vez portaba una pistola calibre .357, haciendo un primer intercambio de tiros, en el cual resulta muerto Pedro Mosqueda Aguayo y Miguel Ángel Uc Magaña, y “Don Vale” resulta herido de gravedad”, apuntó.
Dijo que “las otras tres personas que iban en la cama de la camioneta Silverado, de color rojo, que ha sido también confirmado por la Procuraduría de Quintana Roo que es propiedad del Tribunal Unitario Agrario, con sede en Chetumal, intentan huir, pero son perseguidos por los agresores, quienes les dieron alcance y fueron golpeados con diversos objetos contundentes y efectuándoles también disparos calibre .223”.
Posteriormente, abundó, los suben a la cama de la propia camioneta involucrada en los hechos, trasladándolos hasta el ejido Miguel Alemán, donde los ingresaron al rancho “Los Pericos”, y les prendieron fuego.
Juan Manuel Herrera manifestó que tuvieron conocimiento de la identificación de los otros tres calcinados por denuncia de sus familiares, quienes en las últimas horas, acudieron a la Procuraduría de Campeche a quejarse de la desaparición de sus parientes y ahora, viajaron a Chetumal, Quintana Roo, a reclamar los cuerpos.
“Hay testimonios de los vecinos y familiares, que aseguran haberlos visto abordar la camioneta roja, propiedad del Tribunal Unitario Agrario, precisamente en las primeras horas de la mañana del día sábado”, añadió.
Comentó también que solicitaron “a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Quintana Roo, el día de hoy por la mañana, ya con los elementos que contábamos, que nos concediera la incompetencia a favor de esta Procuraduría, por tener comprobado que los hechos ocurrieron precisamente en jurisdicción del estado de Campeche”.
“Ya se encuentra de nueva cuenta personal de esta Procuraduría en la ciudad de Chetumal, Quintana Roo, en donde en las próximas horas se terminará de recibir, no nada más los cadáveres, sino también los demás objetos y elementos que conforman la averiguación previa, que en su momento iniciara la Procuraduría de Quintana Roo, para proseguir nosotros aquí en Campeche, con las investigaciones correspondientes”, expresó.
“También el día de hoy en la tarde, el juez competente del ramo penal nos ha concedido el arraigo de estos cuatro individuos, por lo que se continuará con las investigaciones hasta llegar a esclarecer completamente todos los elementos necesarios para la integración de la averiguación previa y en los próximos días, serán consignados”, puntualizó.
El procurador citó también que la Secretaría Estatal de Seguridad Pública reconoció que Pedro Mosqueda Aguayo trabajaba en esa dependencia “hasta el momento de su fallecimiento y desde el año del 2002, en el área administrativa, cubriendo los turnos de los fines de semana y días festivos”.
“Hay que aclarar, no era policía y no tenía un arma asignada, no estaba dado de alta en la licencia oficial colectiva y no se encontraba en ese momento participando en una cuestión oficial, muy al contrario, había faltado a sus labores”, aclaró.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.